Gabriel Mato aboga por favorecer la convivencia de la pesca y la protección de la biodiversidad
Bruselas, 15 de enero de 2021.- El eurodiputado del Partido Popular Gabriel Mato pidió ayer ante la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo que promueva la convivencia de la necesaria protección de la biodiversidad marina con la actividad pesquera y recordó que la pesca constituye una fuente de alimentos muy nutritivos para una población cada vez mayor.
Durante la reunión de la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo se debatió el informe del eurodiputado popular sobre la Estrategia de la Biodiversidad 2030 de la Unión Europea. En él Gabriel Mato pide que no se demonicen algunas artes de pesca a las que se acusa de ser la actividad más dañina para los fondos marinos, obviando el papel de otras industrias como la del petróleo, el gas, el dragado o la navegación.
En este sentido, Mato lamentó la imagen que se está creando de los pescadores. “No podemos demonizar al sector pesquero y permitir que se piense que son los principales causantes de daño a los fondos marinos”, señaló el eurodiputado popular, que optó por recordar que los pescadores hacen una labor encomiable al asegurar la seguridad alimentaria y reducir la pobreza. Además, están alineados con los objetivos de desarrollo sostenible, tienen unas estrictas normas de sostenibilidad y son los verdaderos guardianes de los océanos.
Durante su intervención, el Gabriel Mato, destacó las mejoras logradas en la Unión Europea, que no se tienen en cuenta dentro de la Estrategia de Biodiversidad. En los últimos diez años la población de peces del Atlántico Nororiental ha registrado un incremento del 50% y la sobrepesca en la Unión se encuentra en un mínimo histórico.
Sobre el establecimiento de áreas protegidas, el informe presentado por el eurodiputado popular recuerda la necesidad de que su declaración se base en criterios científicos y de efectividad y pide que cualquier propuesta que afecte a un sector económico se acompañe necesariamente de una evaluación de impacto ambiental, social, económico y de seguridad alimentaria. “Si nos basamos en objetivos numéricos abstractos, arbitrarios y rígidos que no tengan en cuenta las necesidades específicas de cada zona solo reforzaremos el sentimiento antieuropeísta”, aseguró. “En primer lugar deberíamos centrarnos en fortalecer e implementar de una forma eficiente las áreas protegidas existentes porque si empezamos a trabajar con objetivos poco realistas y difícilmente alcanzables lo único que conseguiremos es socavar la credibilidad de nuestras instituciones”.
En este informe presentado ante la Comisión de Pesca también se defiende el necesario apoyo a la acuicultura a través del Fondo Europeo Marítimo y mediante una simplificación de los trámites administrativos como una vía para lograr los objetivos de la UE en materia de biodiversidad; la inclusión de la revisión continua del avance hacia el objetivo que se contempla para sectores como el agrario; la potenciación del plan de acción para conservar los recursos pesqueros y proteger a los ecosistemas marinos o la mejora de la ordenación territorial, asignando un espacio a los caladeros y a las explotaciones acuícolas existentes para garantizar la supervivencia del sector.
Por último, Gabriel Mato recordó la necesidad de tener en cuenta otros aspectos fundamentales. “Los objetivos no pueden ser solo medioambientales. También se deben tener en cuenta consideraciones socioeconómicas y la necesidad de mantener en el futuro la cadena de valor de la pesca y de la acuicultura”, aseguró y defendió que cualquier decisión relacionada con la biodiversidad cuente con el sector y que se establezcan evaluaciones para medir el impacto de estas, especialmente sobre las pequeñas y medianas empresas para garantizar unos ingresos adecuados.